MUJERES
PINTORAS CAVERNÍCOLAS
(30.000 AÑOS a.C.)
Bio
Las pinturas de Altamira, junto con las 17 encontradas en las diferentes cuevas que forman el conjunto del arte rupestre paleolítico del norte de España, son el testimonio excepcional de una civilización ya desaparecida. Según nuevos estudios que han comparado el tamaño de las manos pintadas en las paredes, concluyen que las huellas rupestres eran mujeres en un 75%. Según esto, en la Prehistoria, las mujeres podrían haber sido las primeras en crear arte, como es el caso de las mujeres pintoras cavernícolas.
La técnica consistía en poner la mano, para luego arrojar diferentes pigmentos con la boca que, junto con la saliva, se convertía en una fina pasta, plasmando así las siluetas. Las mujeres pintoras cavernícolas conseguían distintos colores pulverizando minerales, arcillas y carbón, que mezclaban con grasa o agua. En cuanto a las numerosas representaciones de animales (bisontes, caballos…), se barajan diferentes hipótesis: por un lado, podría ser la obra de los mismos cazadores plasmando sus hazañas y, por otro, la de los chamanes por superstición para garantizar el éxito de futuras cacerías. Incluso podía ser obra de las mujeres que eran las encargadas de transportar y despiezar los animales en las cuevas.